Como todos sabemos, la tendencia de la sostenibilidad ha venido para quedarse, convirtiéndose en una forma de vida. Entendemos la sostenibilidad como la disciplina que intenta satisfacer las necesidades de la actual generación sin sacrificar las futuras generaciones.
Actualmente, todas las organizaciones apostamos por acciones más sostenibles, adaptando nuestras propuestas de valor y actividad a acciones que consigan preservar y cuidar al medio ambiente.
El área del diseño no se queda atrás. En los tiempos que corren, los diseñadores tienen un papel fundamental para poder diseñar productos y servicios lo más sostenibles posibles.
Conocemos el diseño sostenible como una metodología del diseño cuyo principal objetivo es la sostenibilidad, para el diseño de productos físicos de acuerdo con los principios sostenibles tanto en el área económica, social como ecológica.
El diseño sostenible empieza a tomar relevancia en los 80, cuando Organización de las Naciones Unidas creó la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo y, desde entonces, busca el desarrollo armónico y equilibrado a lo largo del tiempo, pensando tanto en el futuro como en el presente y siempre sigue la siguiente filosofía:
El desarrollo del diseño sostenible significa un consumo responsable.
El diseño sostenible se basa en tres pilares fundamentales o como mucha gente conoce, las tres R:
- Reducir.
- Reutilizar.
- Reciclar.
La filosofía del diseño sostenible abarca tanto los productos pequeños de uso diario como el diseño de edificios y grandes espacios como ciudades:
- Viviendas.
- Agricultura.
- Infraestructuras.
- Maquinaria doméstica (automóviles, electrodomésticos).
- Productos desechables.
Principales claves del Diseño Sostenible
Las seis claves para diseñar de forma ética y responsable son las siguientes:
- Reconocer la labor de otros profesionales.
- Aplicar el pensamiento circular y tener en cuenta todo el ciclo de vida de un producto o servicio.
- Pensar globalmente, actuar de manera local.
- Elecciones responsables durante el proceso de diseño (tintas responsables con el medio ambiente, materiales coherentes con la forma de pensar de la empresa…).
- Reducir la producción masiva.
- Generar conversación.
Son infinitas las ventajas que el diseño sostenible tiene frente al diseño convencional, aquí os dejamos unas de las más importantes para nosotros:
- Previsión de cuestiones medioambientales en el proceso gráfico.
- Aumentar el ciclo de vida del producto no solo en durabilidad sino también en utilidad.
- Reducción de costes energéticos y de materiales.
- Aprovechar el impulso de la conciencia medioambiental y estar en sintonía con una sociedad que empatiza con esos términos.
- Innovación y desarrollo de nuevos productos y/o servicios.
- Menos cantidad de residuos a eliminar.
Podemos ver un claro ejemplo del diseño sostenible en la sede que diseñamos e instalamos de Caixa Popular, en la que el eje principal del proyecto se basó en la sostenibilidad y la innovación.
En la cara principal del edificio creó una fachada ventilada para un mejor aislamiento térmico, utilizando materiales sostenibles como el Krion K-Life y cristal.
El resultado es un edificio moderno y atemporal, con un enfoque sostenible, innovador y corporativo.

¿Cuál es la diferencia entre diseño sostenible y ecodiseño?
El diseño sostenible tiene en cuenta todo el ciclo de vida del producto o servicio, contemplando otros conceptos más allá del medio ambiente como son los recursos humanos, el desarrollo local o el comercio justo.
Por otro lado, el diseño ecológico (o como muchos conocen, el ecodiseño), tiene como objetivo reducir el impacto ambiental negativo durante el ciclo de vida del producto velando siempre por la calidad del producto o servicio.
Es decir, el ecodiseño se centra en intentar conseguir los mismos resultados mediante la reducción de impactos medioambientales que puedan producir nuestra actividad. Por ello, el diseño juega un papel muy importante para el medio ambiente, ya que todo el proceso productivo parte de la fase de creación o diseño.
Se trata por tanto de una filosofía aplicable a cualquier producto o servicio. Su fin es reducir el consumo de energía, agua, materias primas… desde la búsqueda de materiales para producir el producto hasta el reciclaje de este, pasando por la fabricación, el transporte, la distribución, el embalaje, uso, reparación, reciclado y reutilización.
Podemos ver un claro ejemplo de diseño sostenible en los desodorantes Fussy, la nueva generación de desodorantes diseñados por el estudio Blond en Londres. Los desodorantes están diseñados con plástico reciclado y es un producto reutilizable, ya que una vez se agota el bloque se puede insertar otro, para ayudar a minimizar el desperdicio de residuos.

Podemos ver también un ejemplo de ecodiseño con el diseño de packaging Cavallum, una combinación de materiales sostenibles e innovación, un producto que se puede reciclar y reutilizar. Se trata del envoltorio de una botella de cava, hecha con madera, que una vez la abres y retiras la botella el envoltorio puede convertirse en una lámpara con un diseño muy estético.

Este producto destaca por los siguientes puntos:
- Packaging con segunda vida: 70% de la caja se convierte en un nuevo producto: una lámpara de mesa.
- Optimización de recursos naturales, materiales y procesos de producción.
- Madera certificada, de proximidad y de repoblación controlada.
- Cartón 100% reciclado y reciclable.
- Pegamento y tinta a base de agua.
- Asa en algodón 100% natural.
- Diseñado y fabricado en España.
- Materiales compatibles para facilitar su reciclabilidad.
- Durable.
- Atemporal
- 95% de sus componentes son 100% biodegradable.
- Libre de tóxicos.
Está considerado como un producto pionero, 100% cíclico, que no apela únicamente a la funcionalidad sino también a la emoción y experiencia, siempre contemporáneo, con gran transformación social ya que Cavallum fomenta la sostenibilidad a través de la creatividad para promover una nueva forma de pensar y actuar de las personas.
Compromiso con el Diseño Sostenible
Todas las marcas han de estar concienciadas y comprometidas con la sostenibilidad, integrando este concepto en todos sus procesos y en toda su actividad, prioritariamente en el diseño. Cada vez más, los consumidores exigen que todas las empresas cumplan acciones sostenibles y demandan productos que así lo sean.
La sostenibilidad está integrada dentro de los valores de Logopost, por lo que todos los diseños y los procesos los intentamos hacer de la forma más sostenible posible.
Entendemos la sostenibilidad como un equilibrio basado en el bienestar de las personas que intervienen en nuestra actividad diaria, en una cultura del diseño que prioriza la calidad y durabilidad de sus soluciones y en la responsabilidad de contribuir y revitalizar nuestra economía local y nacional.
En el ámbito social, priorizamos el bienestar de todas las personas que intervienen en nuestros procesos de diseño, desde nuestros empleados, proveedores y clientes. Creemos que un buen ambiente de trabajo está impregnado en el éxito de nuestros productos y servicios.
Y tú, ¿Ya utilizas el diseño sostenible dentro de tu organización?